El escultor Pedro Quesada, que fue miembro de la tercera promoción de jóvenes creadores de la Fundación Antonio Gala, recoge hoy el primer premio de la XXVI Bienal Internacional de Escultura Jacinto Higueras celebrada en la localidad de Santisteban del Puerto, que ha ganado con su obra Inocencia. La obra en bronce es una metáfora sobre la ingenuidad de la incipiente juventud, y captó la atención del jurado por su limpieza de líneas, sutileza de formas y armonía compositiva.